Si has llegado a este post, seguramente estés empezando tu carrera como streamer o bien llevas ya un tiempo y necesitas algunos consejos para crecer más rápido. En este artículo, concretamente, vamos a ver cinco errores comunes que hacen los streamers. Si te sientes identificado con alguno de ellos… quizás es el momento de tomar un rumbo distinto.
Antes de empezar es importante que tengas en cuenta que ser streamer de éxito no es nada fácil. No hay una fórmula exacta y los posts tipo “100 consejos para ser mejor streamer” son solo eso, consejos.
Este post es otro ejemplo para ayudarte en tu carrera como streamer pero todos sabemos que los milagros no existen y que muchos factores no dependen directamente de nosotros: el algoritmo de la plataforma, la cantidad de streamers o, incluso, la suerte de que alguien popular te de a conocer.
En todo caso, hemos ido recopilando algunos de los errores más habituales que hacen los streamers principiantes. Si te sientes identificado con alguno de estos problemas, no te derrumbes; todo lo contrario, lo importante es detectar tus errores para poder mejorarlos. Vamos allá.
1- No planificar tu stream
Muchos streamers pequeños son más de “Work hard” (trabajar duro) que de “Work smart” (trabaja de forma inteligente). Ven más factible dedicar horas y horas de stream sin ningún tipo de planificación que no dedicar un par de horas a la semana o unos minutos antes de empezar el directo para ver qué se va a ofrecer hoy a la audiencia. Una vez estás en streaming, ya no hay margen para maniobrar.
Lo primero de todo es asegurarte que tu contenido va a ser de interés para tu audiencia: ¿ese juego va a traer espectadores? ¿Si hago algo más personal va a gustar? Tienes que preguntarte literalmente por qué motivo alguien en su casa va a gastar su tiempo contigo, así que asegúrate de estar a la altura.
Siempre ten a mano un par de ideas para hablar, jugar o comentar, y así mantener el dinamismo y los espectadores en caso de que no sepas qué hacer, cuando haya fallos técnicos en un juego, etcétera. Aunque este punto te puede parecer absurdo, es realmente importante tener claro en todo momento lo que puedes hacer y nunca quedarte en blanco y transmitir esta inseguridad y aburrimiento al espectador.
2- No interactuar con tu audiencia
A diferencia de leer un blog o ver un vídeo en Youtube, el streaming es como una quedada con amigos. Tu objetivo es conectar con los espectadores que vayan entrando, mantenerlos el mayor tiempo posible y, a corto plazo, conseguir su follow para que vuelvan otro día.
Saludar siempre que entre alguien nuevo, hacer preguntas… en resumen, interactuar con tu chat, aunque seáis dos personas, es el paso más básico para que tu streaming empiece a funcionar. Si te pones en directo y vas a tu bola, solamente jugando y sin hacer caso a tus espectadores, no sentirán que conecten y no verán la posibilidad de crear una comunidad contigo.
Algunas formas de mantener el streaming interactivo son:
- Mirar directamente a la cámara cuando hables.
- Hablar con el chat, ir sacando temas de conversación y haciendo preguntas.
- Incluye gráficos y pop ups en tu layout para mantener el interés de los espectadores.
- Añade juegos y recompensas a los espectadores por su fidelidad, como los puntos del canal de Twitch.
3- Ignorar las estadísticas del streaming
Uno de los beneficios de hacer streamings es la información y los datos que se pueden recopilar de su evento. Desde los perfiles de usuario hasta cómo se comportan los espectadores durante el streaming.
En el caso de Twitch, esta sección se llama Análisis del canal y rendimiento de la transmisión, y solo está disponible para afiliados y partners. En este otro post hablamos con más detalle de esta sección y vamos métrica por métrica para entender todas las estadísticas que Twitch nos da sobre nuestro streaming.

Quizás de entrada piensas que esta información no es importante pero no es así: los datos que te dan son pistas para ver hacia dónde orientar tus streamings.
Por ejemplo, puedes saber qué horas y días te funcionan mejor para hacer streamings, ya que podrás ver cuándo tienes más espectadores. O bien si muchos usuarios vuelven o no en tus próximos directos: si no es así, tendrías que pensar en cómo fidelizar más a tus espectadores.
También te da información sobre qué otros juegos ve tu audiencia para que puedas probar otro tipo de contenido sin estamparte y quedarte con menos viewers, o bien los cinco canales con los que compartes mayor porcentaje de espectadores, y de ese modo plantearte una colaboración con algunos de ellos.
Este punto va muy relacionado con el primero error que os comentábamos, el de no planificar tus streams: no solo se trata de tener claro el contenido que vas a ofrecer sino también saber cómo relacionarte e interactuar con tu audiencia teniendo en cuenta todas esta información que la plataforma nos da.
4. Un streaming de mala calidad
No estamos hablando de invertir miles de euros en un set up; ya sabemos que para empezar, es difícil tener el equipo más pro para hacer streamings. Sin embargo, aquí hablamos de sentido común, unos mínimos de calidad.
Piensa que un espectador que pasa por un stream dedica una media de 90 segundos para ver si se queda o se va: la primera impresión, pues, cuenta.
Contar con unos periféricos decentes es lo primero si tienes intención de ponerte a hacer streamings. En este otro post hablamos con más detalle de todo el equipo que vas a necesitas pero así en resumen, creemos que para empezar lo básico es lo siguiente:
- Una imagen de calidad a través de una webcam o cámara decente.
- Una buena calidad de audio a través de un micrófono decente.
- Una buena iluminación. Si no cuentas con luz natural, tendrás que optar por unos focos. En este otro post vemos una guía completa de iluminación para streamings.
- Una buena conexión a Internet para evitar interrupciones y fallos técnicos durante el stream.

5- No interactuar en redes comunitarias
Para terminar esta lista de errores más comunes entre los streamers, este otro punto muy importante. Seamos sincero: el mundo de los streamers es muy complicado. Existe mucha competencia y hacerse un hueco en una plataforma como Twitch es difícil.
Si eres pequeño y estás empezando en este mundo, colaborar y apoyarse con otros streamers de tu tamaño como tu es imprescindible. Hacer comunidad e ir creciendo poco a poco gracias a la ayuda de otros, siempre de forma recíproca, es un camino honesto.
Ya sea a través de redes sociales como Twitter, donde promocionas tu perfil de forma frecuente, o desde las mismas plataformas como Twitch o Youtube, solo te funcionará si das y recibes por partes iguales.
Si por el contrario, solo te dedicas a hacer spam de tu perfil… no va a colar. La interacción tiene que ser real. Hoy por ti, mañana por mi: hoy me paso yo por tu streaming y me quedo un rato, y tu lo haces mañana. Hoy te doy mi suscripción de Prime Gaming a ti y tu, el mes que viene, la canjeas en mi perfil.
Hay que apoyarse con los streamers como tu, que también intentan hacerse un hueco en este enorme mundo. No los veas como competencia sino como una oportunidad de conocer gente, hacer colaboraciones y crecer a base del apoyo mútuo.
Si te ha gustado este post de cinco errores comunes que hacen los streamers, te recordamos que tenemos canal de Youtube donde subimos vídeo cada semana:

¡Nos vemos en otro post!